Ya había conducido un bote de velocidad y bailado reguetón, lo demás fue mero trámite.
-Gasolina Daniel Espartaco Sánchez-
“¿Es de culos y balazos?” Sí, es de culos y balazos; literatura, drogas, pseudonarcos, persecuciones, gente fea que tiene experiencias chidas. Así puede ser una descripción de Gasolinade Daniel Espartaco Sánchez.
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| http://nitro-press.com/ |
No es una novela, pero tampoco un cuento. Es un gran relato sobre una convención de escritores de esas que no nos cuentan. Una convención que contiene todos los típicos personajes que se pueden encontrar en un universo de “escritores”: el snob, estudioso y pedante literato, la mujer atormentada que intenta vampirizar la literatura, el vale madres que le salen las cosas bien no importa qué y el protagonista. Un tipo que no sabe a dónde va, viene o irá —como cualquier otro que vive en estos tiempos donde se es nadie entre muchos nadie—.
Aunque el narrador puede ser considerado el protagonista, es a la mitad de la lectura cuando se cuela el que, para mí, es el verdadero protagonista: Wilson Carrera, un escritor de Tampico al que, con sus actitudes, demuestra que le vale madres la convención y él a lo que va es a buscar cocaína y desmadre y nada más… bueno y más coca.
Lo que hace este libro especial es la “reivindicación”, del reguetón —y seguramente con esta línea ya habré perdido a unos cuantos lectores coc4inomanos, pero no se vayan, que no está mal este cotorreo—. Como seguramente a algunos les habrá pasado —a mi me pasó al menos— al leer Gasolinacomo el título del libro, no puede evitarse pensar en la canción que saturó nuestros oídos, mentes y hasta fiestas familiares: la Gasolina de Daddy Yankee y ¿qué creen? ¡Atinaron! Es total y absoluta referencia a esa —ya incertada como vox populi— canción. Durante algunas escenas del libro se citan algunas estrofas de la canción mientras en un bar —de mala muerte en algún puerto paradisiaco de México— la mujer por la que babea el protagonista baila, hábil y diestramente, el reguetón.
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| Daniel Espartaco http://www.vertigopolitico.com/ |
No hablaré, ni halabaré al reguetón, ya que, como a muchos que leen esta página, no me gusta en lo más mínimo. Sin embargo, Espartaco Sánchez describe un México el cuál todos conocemos, que si bien la mayoría somos citadinos, sabemos qué sucede en los barrios del interior del país. Gasolina tiene elementos totalmente actuales y reconocibles, la música que más se escucha, por tanto: de moda. El auge actual —y me maldigo por que soy parte de— por el interés de ser escritor o si no el interés, la “necesidad” de serlo, como algunos snobs claman. Gasolina es un libro entretenido, en todo sentido, el lenguaje, las acciones y los personajes.
Al leer Gasolina en uno se puede formar fácilmente la imagen de las escenas en la cabeza como si fuera toda una buena película de acción Hollywoodense con colaboración de los hermanos Almada y Lola la Trailera.
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Ahora, como siempre será, espero, vienen las especificaciones y los sitios dónde se puede comprar. El libro es editado por la editorial Nitro Press (http://nitro-press.com/) y justamente salió a la venta este año —lo que quiere decir que es novedad—. Se puede conseguir en las afamadas librerías de prestigio o si ustedes desean la versión más padre, lo que quiere decir pasta dura, pueden comunicarse directamente en la página de la editorial y ahí les darán facilidades de pago y esas cosas que suceden cuando se hace cambio de moneda-artículo.
