Nerby ha confesado partir de cero para este trabajo, y lo cierto es que su propuesta está llena de elementos muy interesantes. Aunque respeta el concepto de línea temporal para mostrar los mensajes, el diseñador introduce un nuevo sistema para visualizar las interacciones entre diferentes cuentas. También crea ventanas separadas para favoritos, o infografías automáticas con estadísticas de un determinado usuario.
En el lado negativo, hay que reconocer que algunos elementos de su propuesta son muy llamativos, pero probablemente sean poco prácticos desde el punto de vista de la usabilidad. Por otra parte, todo queda muy bonito cuando se utilizan imágenes de recurso de Rihanna a gran tamaño, pero las fotografías del timeline nuestro de cada día quizá no sean tan agradables a la vista.
El creador de esta espectacular versión de Twitter es conocido por otro rediseño de Facebook que mostró en enero de este año y que puedes ver aquí. Nerby ha realizado ambos trabajos por pura diversión, y no aspira a que Twitter se fije en él para un eventual rediseño. Nosotros tampoco. La red social ha mantenido una sólida trayectoria de despropósitos visuales y de usabilidad, y no parece probable que vaya a aplicar el sentido común a estas alturas. Mis esperanzas al respecto se desvanecieron tras la compra y rediseño del mítico Tweetdeck.
