From Melbourne with love!
Actualmente los medios de información se renuevan y la sociedad jamás volvería a ser la misma, ya que nuestro estilo de vida cambiaría radicalmente, ya que con la llegada del Internet se modificaría nuestra manera de interactuar, relacionarse, e incluso de difundir el arte, y en especial la música, ya que a través de éste medio todo es posible y que con la ayuda de una cámara y una conexión a internet las ideas musicales se pueden hacer llegar al otro lado del mundo, y así las barreras se disuelven, puesto que la labor titánica de las grandes disqueras se ha dejado a un lado y ya no es necesario ser The Beatles, The Rolling Stones o Jimmy Hendrix para cruzar el Atlántico y dar a conocer tu música...

Pero independizarse no es un cuento de hadas y optar por la vía de la independencia ha hecho que los músicos luchen cada vez más y hagan de su trabajo una labor admirable, puesto que además de tener que aumentar su calidad musical, cada día los músicos son además sus propios productores, promotores, administradores y diseñadores y que en ésta ocasión nos llevará a hablar de una chica que ejemplifica ésta enorme lucha y que desde Nueva Zelanda vino a cambiar la manera de hacer la música: Kimbra.
Esta chica de tan sólo 22 años de edad ha logrado una gran trascendencia en la industria y enseñado la importancia de la perseverancia para poder dar a conocer sus ideas, ya que a pesar de lo que pensamos, su trayectoria ya es bastante larga, y desde los 10 años comenzaría a escribir las primeras canciones de sus letras, y a esa misma edad ya cantaría el himno nacional neozelandés antes 27,000 personas en un partido de Rugby.
Así a pesar de que su carrera parecía ser prometedora en realidad estaría ausente de la escena y sería hasta los 17 años, en que cuando al ganar el premio Juice TV por realizar el mejor video musical llamado “Simply On My Lips”, llamaría la atención del público y la llevarían a hacer presentaciones en vivo cada vez más frecuentes, y así sería como Mark Richardson de OutPost Management la descubriría y comenzaría a dibujarse el camino de su carrera, y de ésta manera en 2011 vería la luz su álbum debut titulado Vows, el cual tardó tan sólo 3 años y medio en producirse porque las grabaciones y los arreglos fueron complicados y hechos en varios estudios y algunos de ellos en casa, pero que al final se concretarían en un disco que describiría la esencia de la artista y que sólo se podría definir como un estilo ecléctico con toques de neo-pop y funk, pero que con la ayuda de un iPad y un par de micrófonos, relataría la vida, el amor y sobretodo una gran sofisticación musical, inspirada en Nina Simone, Jeff Buckley, Prince, Björk, Janelle Monaé, Marvin Gaye y hasta The Mars Volta.

Cantante, compositora e Instrumentista, Kimbra llegó para quedarse y satisfacer los oídos más exigentes, puesto que la chica de Melbourne ha demostrado con madurez explotar su creatividad al límite y reflejarla en su música, en el viaje ecléctico que se plasma en sus videos, llenos de arte conceptual , colores y estilo e incluso en sus outfits tan especiales, lo que seguramente la consagrará en la industria musical y hará que muy pronto estemos recibiendo muchas noticias más acerca de éste gran espíritu musical creativo y libre.
Para conocer un poco más de ella, visita su website oficial: www.kimbramusic.com/