Si lo tuyo es convivir en un ambiente un tanto relajado, disfrutando de una rica cena, una cerveza y buena música, esta es la opción perfecta.
El viernes pasado tuve la oportunidad de visitar este lugar, para ser sincera al verlo no me prendió mucho ya que yo tenía mas ganas de bailar, que de cenar y convivir con mucho intelectual y otros no tanto. En fin, al llegar al lugar lo primero que me llamo la atención fue la decoración del lugar, ya que esta repleto de imágenes, papel tapiz, pintas, cuadros, fotos, una bici y muchos otros objetos un tanto raros.
En fin nos sentamos, los meseros muy atentos nos llevaron la carta y comencé a observarla, yo no llevaba ganas de comer pero al ver los platillos que tenían no me pude resistir y pedí una crepa, no sin antes pedir una cerveza bien fría,
Cabe mencionar que el lugar es pequeño, pero de muy buen ambiente, ponen música de todo tipo para deleitar el oído de cada visitante. Posteriormente llevo mi crepa y para mi sorpresa era una delicia, como ya me había terminado mi cerveza me dije ¿por qué no, voy a pedir un mojito?, pues no les mentiré a sido el mejor mojito que me he tomado en mi vida, eso si tardan un poco en traer las bebidas pero vale la pena.
Sin duda es un lugar que les recomiendo ya que pueden disfrutar la buena comida que es entre española e italiana, su especialidad son las tapas españolas, aunque también las patas están muy deliciosas, predomina el estilo taurino, así es que si eres vegano probablemente no te sientas muy a gusto al ver en la pared principal la cabeza de un toro.
Los precios son bastante accesibles, los platos son muy bien servidos, las bebidas no están rebajadas, el servicio es bueno ( solo un poco tardado), la música es variada, la gente que lo visita es amable , cada quien esta en su onda y si vas solo no dudes que terminaras en mesa de alguien mas o conociendo gente.
De verdad es de esos lugares mágicos que te envuelven en un ambiente fuera de lo normal, llega un momento en que lo disfrutas tanto que te sientes en otro país, rodeado de tanta gente distinta, que habla de temas variados, que disfruta de la compañía y de una buena charla, Porque si hay algo que me causo admiración es que poca gente estaba con sus teléfonos, a mi parecer creo es por el motivo de todo lo que envuelve el lugar y puedes pasar horas sin hablar y ver cada objeto que hay en sus paredes.
Así es que si te atreves, visita Hostería La Bota, a fuera puedes estacionar tu bicicleta, también hay un ciclo estación y es bastante seguro.
San Jerónimo 40
Entre Isabel la Católica y 5 de febrero
Col. Centro De La Ciudad De México
Tel. 5709 9016
