Los esfuerzos para hacer de la ciudad un lugar viable de nuevo no paran. Ahora la bicicleta, más que ser una moda pasajera de movilidad urbana o un nuevo target de mercadotecnia mexicana, se ve por algunos como una experiencia ligada al estilo de vida.
Aquí te traemos proyectos para comer, escuchar, compartir y conocer la ciudad, todo a través de las dos ruedas.
La noticia replicó fuerte. Una patrulla atropella a un ciclista. Otro más, a pesar de los esfuerzos. Una bicicleta blanca está por aparecer de nuevo, a pesar de todos. La primera aún cuelga de la esquina del Parque España, cuelga junto a una investigación inconclusa, y un sentimiento colectivo herido.
He escrito tantas palabras como me sea posible tratando de esclarecer el hecho de que convertirnos en un "pueblo bicicletero" y que no se compare con un retroceso a nuestra "avanzada" ciudad...
Hemos tratado de salir a las calles, hacerlas mejores para peatones, automovilistas y cualquiera que comparte el terrible pavimento en el que nos tocó rodar; hemos tratado de convivir con ustedes y ustedes no con nosotros...
No hay por qué detenerse. Hoy por hoy, la comunidad ciclista de la ciudad ha incrementado de tal forma que ya no son solo un colectivo que sale a rodar por las noches. El efecto del ciclismo urbano ha impactado a (casi) todos los sectores de la sociedad, al menos, de la capital que habitamos.
Ahora es posible, comer, conectarse, escuchar, compartir y hasta incluir nuevas personas a tu circulo social a través de rodar por las calles. Muchos de estos proyectos ya existían en la ciudad pero vivían el rezago de trasladarse en una ciudad monopolizada por el automóvil...
No los culpamos. Entendemos que el automóvil era el objeto de crecimiento económico a mediados de siglo. En el caso del DF, muy parecido al caso de ciudades americanas como Detroit (y según lo que le entendí a David Byrne en su "Bicycle Diaries") las grandes ciudades crecieron a favor del uso del automóvil. Ejes de crecimiento y "movilidad", distribuidores viales y espacios enormes de conducción eran el objeto principal para el desbordamiento urbano. En el caso de la Ciudad de México y el área metropolitana, se buscaba conectar el gran espacio que ocupa la ciudad por medio de grandes avenidas como el Periférico; o conectar el lugar de trabajo con las zonas bajas de la ciudad, como lo hozó Don Porfirio con el Castillo de Chapultepec y la ahora Av. Reforma.
Las ciudades han rezagado a las formas de movilidad que se diferencien del automóvil desde hace años. El ciclismo es visto como un medio de diversión, un juguete o un pasatiempo o un deporte especializado por la mayoría; el punto es que este recurso se ha transformado en más que eso, incluso en un objeto de mercado. Los siguientes proyectos nos demuestran los alcances que han obtenido a la par de la comunidad ciclista tan solo en esta ciudad... Y a pesar de los múltiples obstáculos:
Insolente
El primer error es menospreciar el poder femenino natural. Histórico y recordado pero casi nunca comprendido. De esto se trata Insolente, el –me atrevo a escribir– primer colectivo femenino sobre bicicletas. Vieja escuela del ciclismo urbano, el objetivo de estas chicas es acercarte a las calles de la ciudad y perderle el miedo a su tráfico diario. Ellas son las que quitan las llantitas y te dan el primer empujón hacia la verdadera calle. Promueven cualquier proyecto que mejore la calidad de vida de la ciudad, y usan la bici como su arma mas eficaz. Claro, y como se debe de esperar, no pierden el estilo único de mujer y la sonrisa, haciendo la combinación aún más irresistible.
¿Como funciona Insolente? Simple. Pides ayuda contactando con el equipo, ya sea por Twitter o FB, y ellas te ofrecen la ayuda. El proyecto más reciente es generarte una ruta para que puedas asistir a tu trabajo y hacer de la bicicleta tu medio de transporte natural, te acompañan en tu primer viaje y tienes la tranquilidad de rodar sobre una ruta bien planeada. El proyecto "A la Chamba en Bici" funciona simple:
1) Mandas un mail con tus datos (nombre, edad y tipo de bici) a su contacto a través de la pagina web: http://insolente.mx
2) Recibirás un cuestionario para diagnosticar tu experiencia, habilidades y tácticas en la bici, y ellas
revisan cuales se deben de mejorar. El trato es individual, por lo que los estilos también diferencian.
3) Al término de este proceso, ellas diseñarán tu ruta más adecuada, pensando desde la seguridad de ti y la bicicleta como de tu demanda física.
4)Cuando estés listo, te acompañan en tu recorrido entre semana tanto de ida como de regreso.
Todos ganan: Tu reafirmas tu confianza con la bici y con la calle, se genera comunidad, haces crecer a Insolente como proyecto comunitario y todo en pro de la movilidad en la ciudad. Un total éxito.
Mas info en @yoinsolente
4)Cuando estés listo, te acompañan en tu recorrido entre semana tanto de ida como de regreso.
Todos ganan: Tu reafirmas tu confianza con la bici y con la calle, se genera comunidad, haces crecer a Insolente como proyecto comunitario y todo en pro de la movilidad en la ciudad. Un total éxito.
Mas info en @yoinsolente
Bici Gourmet
Para comer bien hay que rodar lo suficiente y disfrutar de la ruta. Eso es Bici Gourmet. Impulsar el uso de la bicicleta en la ciudad no sólo es por cuestiones de movilidad, sino para impulsar un negocio en crecimiento: todos esos restaurantes que son familiares con la ecología y el buen comer.
La conciencia ecológica va de la mano. Su mayor impacto han sido promover a la par que los establecimientos tengan biciestacionamientos.
La rodadas suelen ser cada 15 días los fines de semana, sin tanto cargo de distancia para comprobar que el mismo tiempo que te haces en el auto para comer en Sábado, lo puedes reducir en dos ruedas sin ningún problema. El catálogo de restaurantes cambia, y va desde el Bike And Roll hasta la Pizzería La Barra, pasando por la Mezcalería Vulgar aquí en DF.
Puedes contactarte con ellos y saber de las próximas rodadas en @BiciGourmet
Wikicleta
Supe de Wikicleta en, increíblemente, un programa de Televisa (¡!) uno de esos programas que nadie pela a las 00:00 entre semana, y en ese entonces era un proyecto que apenas estaba en proceso de construcción.
Wikicleta es, orgullosamente, una aplicación mexicana para los ciclistas de esa ciudad. Una aplicación para cualquier dispositivo inteligente (saludos puritanos del iOS) capaz de interconectar a los ciclistas con el fin de conocer a través de tips, como en foursquare o un foro en internet, los puntos críticos de tráfico, las mejores rutas, especificar talleres confiables para reparaciones, restaurantes amables o hasta pedir ayuda en caso de un accidente.
Es una completa maravilla para cuando de rodar se trata, además de que es gratis, es de total funcionalidad. Está llena de sorpresas, como el medir tu "pedal punch" y competir con otros ciclistas en las distancias; tener en contacto a la mayoría de los integrantes de los colectivos ciclistas en la ciudad de forma organizada, y en fin, una de posibilidades que la aplicación ofrece:
Fortalecer a la comunidad ciclista es uno de los puntos más importantes para estad ciudad, y Wikicleta lo logra, a la par que otros viejos amigos, como:
Bicitlan
Hace 3 años exactamente, Bicitlan nació de la idea revolucionaria de incluir a la bicicleta como un artista común del tráfico metropolitano. Se fueron más allá. Han sido el programa por excelencia de cualquier verdadero ciclista. Transmitido por Reactor 105.7. En el lejano 2011 se transmitía por internet y aunque parezca comentario imprudente, bicitlan llegó mucho antes que la moda del ciclismo a la ciudad.
Éstos chicos ya entendían que la bicicleta no sólo implica un gasto, una necesidad o una moda; la bicicleta en muchas circunstancias esta muy cercana al estilo de vida.
A la par de su aniversario, la comunidad ciclista se encuentra de nuevo con ese monstruo que parecía lejano: la indiferencia. La ciudad sigue sin ser amable con el ciclista; dirán los menos optimistas, que es una perdida de tiempo o un innecesario esfuerzo por cambiar el orden establecido...
Estos proyectos demuestran más que nunca que la bicicleta está de vuelta para quedarse, más fuerte, razonable y a la vez paciente que nunca. No habrá ni una bicicleta blanca más en la ciudad, esta en nuestras manos, o mejor dicho, en nuestros pedales hacerlo realidad.
Nos vemos en la calle, con casco y con sonrisa, de aquí en adelante.